Trilogía distópica y postapocalíptica llevada a cabo en un Estados Unidos divido en 13 distritos y un Capitolio. El distrito 13 fue destruido (no lo fue) por querer rebelarse contra el Capitolio. Para mantener el orden, el Capitolio lleva a cabo una competencia, llamada los Juegos del Hambre, en la que dos tributos de cada distrito son entrenados para matarse entre ellos ya que sólo uno podrá salir con vida.
Katniss Everdeen y Peeta Mellark son los tributos del distrito 12, un distrito dedicado a sacar carbón de las minas. Katniss se ofreció en vez de su hermana pequeña.
Primero, van a tener que enfrentarse a los demás tributos en los Juegos del Hambre. Después, tendrán que enfrentarse al presidente Snow, quien es un personaje mucho más aterrador y quien tiene todo el poder para hacerle la vida insufrible a Katniss, ya que lograr que Peeta y ella quedaran como triunfadores, fue tomado como un acto de rebelión en contra del presidente y del sistema.
Katniss se convierte en la imagen de una rebelión a pesar de no desear serlo y se ve inmersa en una guerra de los distritos contra el Capitolio y sus fuerzas.
Es una trilogía que tiene varias tragedias e injusticias. Yo sufrí en varias ocasiones al leerla y me pareció una historia llena de dolor y termina con dolor también. Así mismo, tiene situaciones alegres y muy emocionantes que logran que no pierdas la esperanza.
Relata muy bien la manera en la que los que detentan el poder, llegan a cometer abusos y genocidios sólo para seguir en el poder o conseguirlo. Y como, el pueblo a disgusto con su desigualdad, puede unirse bajo la imagen de alguien o algo que toman como símbolo y rebelarse en contra de su gobierno.
Sin duda, forma parte de mis trilogías favoritas y es una trilogía que no puedes dejar de leer. Es buenísima y diferente!
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