Ben Coffin es un chico de 12 años que ama los libros y la ciencia ficción. Vive con su madre adoptiva Tess y no tiene muchos amigos.
Un día un perrito, al que defendió de un gato fuera de la biblioteca, decide seguirlo hasta su casa. Este será el comienzo de una gran amistad. El nombre del perrito será Flip.
Gracias a Flip y a la bibliotecaria, conocerá a Halley, como el cometa, una niña alegre, muy inteligente, a la que le gusta leer y escribir. Los tres vivirán momentos felices y muy especiales. Lamentablemente, ella está enferma y lucha con algo muy difícil de vencer, cáncer.
Pienso que es un libro muy emotivo. Confesaré que la lucha de Halley contra el cáncer me sacó algunas lágrimas. Era una niña muy vital, fuerte y dulce. Sin duda, le dejó mucho aprendizaje a Ben.
Me gustó que Flip fuera un perro terapéutico y que fuese tan educado. Sin duda los perros son muy fieles, grandes compañeros y de las criaturas más hermosas del planeta. Me encantan los perros!
Me molestó cuando Leo lo pateó. Esas actitudes de algunas personas hacia los animales siempre me han molestado. Creerse superiores a todo lo demás no está bien en mi opinión. Y menos con seres inocentes.
Ben tenía un lindo corazón, a pesar de haber vivido en muchos hogares y de haber pasado por situaciones tristes, era un buen niño que pensaba en su futuro y en los demás.
Recomiendo este bello libro y lo agrego a mi lista de favoritos.
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