El mundo ha sido invadido por una raza alienígena que considera que los humanos somos muy violentos. Son unos seres con forma parecida a la de un pulpo que caben en la palma de la mano y se llaman Almas. Estos seres invaden los cuerpos humanos y se adueñan de ellos haciendo, normalmente, que el ocupante previo desaparezca; aunque, hay ocasiones en las que no desaparecen y el Alma y el humano se disputan el dominio del cuerpo. Si esto se presenta, los humanos son asesinados.
Melanie forma parte de un grupo de humanos que han sobrevivido a la invasión de las Almas y está enamorada de Jared. Por evitar que su hermano sea capturado, Melanie distrae al grupo de Almas que los están buscando y se ve obligada a intentar suicidarse para no ser capturada. Las cosas no salen bien y ella, a pesar de su intento de suicidio, es capturada e invadida por un Alma llamada Viajera (en inglés Wanderer), con la que se verá obligada a convivir ya que las dos tienen parte del dominio de su mente y cuerpo.
También es una novela en la que el amor es fundamental y es algo cursi. Sin embargo, la considero más inteligente que la serie de Crepúsculo ya que se mete con el pensamiento humano, la voluntad, la libertad y la bondad. Resalta la unión de unos pocos y la esperanza.
Me parece muy ingeniosa la manera en la que los sobrevivientes viven en las cuevas y se protegen de las Almas.
Me gusta que Wanderer, «Wanda», sea diferente a las demás almas y que se dé cuenta de que la invasión no es la solución a la violencia humana. Además, los seres humanos amamos nuestra libertad y hemos demostrado que lucharemos por ella siempre.
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