Nunca sabemos el nombre de la protagonista de esta historia que se lleva a cabo en Manderley, la mansión de Lord de Winter.
Ella se casa con Lord de Winter, después de haberlo conocido en Montecarlo. Él ya estuvo casado con una mujer, Rebeca, quien falleció recientemente en el mar, y quien, al parecer era querida por todos.
Al llegar a Manderley, nuestra protagonista se da cuenta de la importancia que Rebeca tenía ahí. Los sirvientes la querían y hacían todo como ella deseaba, los amigos y familiares de De Winter tenían muy buena opinión de ella. Todo esto hace que la protagonista se sienta insegura y decide dejar todo tal como la antigua señora lo tenía. Así comienza a vivir su matrimonio comparándose con Rebeca.
Parece que a pesar de estar muerta, Rebeca sigue teniendo mucho poder en Manderley, pero la situación podría cambiar (para mejorar o empeorar) después de un descubrimiento realizado por accidente.
Me pareció un libro adictivo y que me mantuvo en suspenso. Me gustaba imaginarme Manderley y sus alrededores.
La protagonista me pareció muy insegura, algo débil y no muy lista. Hay pistas a lo largo de la historia que nos indican que hay algo extraño con la muerte de Rebeca a las que ella no presta atención. Además creo que si ella hubiese sido más fuerte desde el principio, las cosas se hubiesen dado de mejor manera.
Detesté a la Sra. Danvers, si yo hubiese sido la protagonista la hubiese despedido rápidamente. Estaba obsesionada con Rebeca y era una mala persona. Entre todos los demás sirvientes y la protagonista podrían haber administrado Manderley correctamente.
El final no fue lo que esperaba porque yo quería saber más, no solo imaginármelo. Sin embargo, es un final que te deja en suspenso, al igual que el resto del libro.
En mi opinión, este libro es muy recomendable y estoy considerando agregarlo a mis favoritos.
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