Esta genial trilogía se lleva a cabo en un mundo postapocalíptico, en el cual habitan criaturas llamadas Engendros, que son unas mutaciones de humanos cuyo único objetivo es alimentarse de carne y sangre humana. No son zombis, en los libros se explica esta situación.
Algunos humanos han sobrevivido viviendo en enclaves bajo tierra y nunca saliendo a la superficie. Trébol habita en uno de estos enclaves, llamado Escuela, y forma parte del grupo de los Cazadores. Para desempeñar su papel como Cazadora, la colocan como pareja de un chico llamado Van, un chico que no nació en el enclave, pero por su habilidad para sobrevivir le fue permitido quedarse.
Los problemas surgen cuando reciben noticias de que Nassau, otro enclave, ha sido atacado por los Engendros y Trébol y Van son encomendados a ir a ver cuál es la situación en Nassau.
A partir de eso, ocurrirán numerosas situaciones que cambiarán la manera de ver el mundo de Trébol, desde descubrir que no toda la vida está bajo tierra y que el mundo está destruido, conocer personas diferentes a las que habitan a los enclaves, tener que aprender a convivir y que no es malo tener sentimientos, enamorarse, luchar en cruentas batallas con los Engendros, perder amigos, etc. En fin, esta trilogía está llena de aventuras.
Todas las batallas están descritas detalle a detalle, los baños de sangre y los movimientos que utilizan los personajes. Podríamos decir que es una trilogía un poco sangrienta y sin censuras, lo cual me gustó mucho.
Por otro lado, me encantó la fascinación que demostraba Trébol ante cualquier cosa que fuera desconocida en Escuela y su gran fortaleza y determinación ante cualquier situación. Su educación en un enclave la ayudó a sobrevivir, junto con Van, y a nunca sentirse menos que alguna otra persona. Además, siempre contó con amigos fieles, Van, Stalker y Tegan. Bueno, Stalker le dio algunos problemas, ya sabrán de qué hablo al leer el libro, pero al final, demostró ser valioso.
También, personajes como Mamá Robles y Edmund ayudaron a que Trébol fuera una chica más completa y a que viera que no todo en la vida es estar luchando, ser fría y que te tengan miedo. Sin embargo, ella nunca perdió esa ferocidad y gran capacidad que la caracterizaba.
Me pareció curiosa la manera de decidir el nombre de los habitantes en los enclaves y que para ellos un viejo fuera alguien de veinte años. En Salvación, el asentamiento donde vivían Mamá Robles y Edmund, Trébol cambió su manera de medir la vejez y se dio cuenta de que existían humanos con muchos más años que 20, también se dio cuenta que ser un fanático religioso no funciona tan bien como los habitantes de Salvación pensaban.
Ah! Les diré que en «Horda» ocurre algo asombroso y crucial en relación a los Engendros. Y aparecen nuevos personajes interesantes, tales como Morrow, Thornton, Tully y Spence. También, aparecen otros asentamientos con diferentes costumbres y diferentes maneras de sobrevivir.
Bueno, agrego esta trilogía a mi lista de favoritos. Sin duda, es una de las mejores y más divertidas que he leído. Muy recomendada!
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